Era una época donde la línea de vuelo, se mezclaban los guerreros clásicos, en la Base Aérea situada en Carrasco. Aparecían así algunos que otros F-51, pero detrás de ellos, la silueta del B-25 no pasaba desapercibida. Es que nuestro País, por esa época, contaba con aeronaves que aún no eran catalogadas como clásicas, todo lo contrario...eran aeronaves modernas, punta de lanza de varias naciones, y columna vertebral de la Fuerza Aérea Uruguaya.

El rojo y azul de las banderas en los timones gemelos lucían de maravilla, hermosas, grandiosos tal vez. Estaban prontos, para realizar el primer vuelo del día, mientras despuntaba el sol en el horizonte y el personal técnico hacía la recorrida... si no era que ya alguno de ellos, recién había aterrizado de realizar quizás, una patrulla en el litoral.

Este bien podría haber sido, un día típico de los jóvenes oficiales y hoy actuales disertantes en nuestro Instituto. Y casi en un cerrar y abrir de ojos, más de 70 personas en el auditorio, entre amigos, camaradas y cadetes escuchaban las anécdotas de estos dos guerreros que tuvieron en sus manos los comandos del "Mitchell" en nuestros cielos, y que nos transportaban a esa época dorada de nuestras alas militares.

La conferencia se llevó a cabo en el anfiteatro de la Unidad. La disertación comenzó a cargo del ingeniero tecnológico aeronáutico Adrian Alonso, para darle luego paso al Cnel. Oscar Vilche y al Tte. 1° Humberto Arioni, ambos pilotos de la entonces dotación del Grupo de Aviación n.º 3 (Bombardeo).

Cuentos, risas y momentos emocionantes no faltaron, algunos de ellos con hondo sentimentalismo que comenzó con una frase "..me había tocado ser el último piloto en volar el último B-25 operativo...".

Nunca alcanza una hora para escuchar las distintas operaciones de vuelo relatadas en primera persona, vuelos tácticos, entrenamiento para desfiles aéreos, y misiones específicas como cuando volaron el "158" en la jornada que "atacaron" y hundieron una balsa construida para blanco de bombardeo.

Hoy día, es posible visitar un B-25 en nuestro Museo Aeronáutico Cnel. (Av.) Jaime Meregalli. El mismo es denominado "Charrúa". Y si bien tiene una rica historia, en la cual el lector podrá informarse al visitar el Museo, también podrá pedir que le muestren, la única pieza original que se conserva del B-25J FAU 156 "Charrúa" con que contó nuestra FAU y que es ahora, parte de la estructura del veterano Mitchell.

Como está plasmado en la página "pilotoviejo", Humberto diría acerca de un trozo del fuselaje que lo guardó para él, y que luego lo cedió para que fuese parte de lo que es hoy, patrimonio de todos nosotros: "...es un pedazo de aluminio con mucha historia. Está en buenas manos."

Fotos: sitio web ratonesdehangar